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martes, 12 de octubre de 2010

Madres, un ejemplo al corazón!

Estaba el otro día en Plaza de Mayo, y es uno de los lugares que tienen esa magia que se apodera de mis sentidos. Es uno de esos espacios en los que me podría pasar horas contemplando cada detalle que lo compone. Es que hay tanta historia ahí. Tantas cosas sucedieron en aquella Plaza! Tanto, que solo con hacer silencio y mirar uno puede escuchar que cada elemento habla, cada centímetro tiene algo que contar!
Pasado el mediodía el escenario va tomando color para recibir a las grandes estrellas de esa tarde! . Y ahí están ellas. Son las madres del dolor, "Las madres de Plaza de Mayo". Tan enormes como pequeñas, tan silenciosas como ensordecedoras, tan frágiles como fuertes!
El lugar se llena de espectadores, y la Plaza se llena de emoción. Veo como los turistas sacan sus cámaras, sin entender que el amor no puede registrarse en una fotografía, o tal vez si.
Y ellas comienzan, como desde hace 33 años sus vueltas alrededor de la pirámide. Con las fotos de sus hijos aún desaparecidos, con una convicción que aumenta
en cada paso, con una fuerza que sobrepasa su sencilla imagen. Los rostros de los visitantes se llenan de lágrimas, una joven no para de llorar y tapa sus enrojecidos ojos con unos enormes lentes oscuros, y es que es inevitable no meterse en el corazón quebrado de cada madre, ese corazón que no fue diseñado para soportar la pérdida de un hijo y que aun no encuentra consuelo. Desde el cielo caen unas pequeñas gotas, como acompañando la situación y cesa al instante como dándose cuenta que ni la mayor de las tormentas las podría detener. Dándose cuenta que lo que se creé con el corazón nada ni nadie puede impedir que sea realidad. Y allí son para mi un ejemplo de constancia, de lucha, de amor. Son un mensaje de Dios diciéndome que es inevitable que no se estremezca el corazón de aquel que ve una entrega tan grande y genuina. Que se podrá argumentar miles de cosas pero nadie negará su amor y convicción, sumados a creer que nunca es demasiado tarde, que mientras haya aire para respirar hay una oportunidad de que las cosas cambien y aun si así no fuera, podremos decir que hemos dado todo de nuestra parte. Cuanto amor en esas madres, cuanto amor en todas las madres, seres increíbles creadas con una capacidad mayor de amor, creadas para dar sus vidas por sus hijos, dar sus vidas por lo que creen! Y mientras las veía pensaba que orgullosos se sentirían esos hijos al ver lo que esas madres luchan sin nada que pueda detenerlas expresándoles ese magnifico amor día a día.
Hoy tenemos un objetivo: que nuestras madres sientan ese mismo orgullo y un amor de esa misma talla!
El gran desafío: que Dios pueda sentir todo eso que yo sentí al ver a esas madres cuando mire el resumen de mi vida!
Hoy se que no podre decirle que lo he hecho bien, pero no podrá negar que aun con mis errores cada día lo intento con todas mis fuerzas!
 Info acerca de las Madres y su causa.

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